El politólogo Radamés Graterol dijo a El Pitazo que los venezolanos vencieron el miedo a manifestar su desacuerdo y no respaldaron el proceso del 3 de diciembre. En esta consulta, el Gobierno buscaba medir su movilización y logística, solapar la Primaria de oposición y usar el patriotismo para unir a la población
Mayreth Casanova – El Pitazo
El referendo consultivo por el Esequibo que se realizó este domingo, 3 de diciembre, avivó el debate en redes sociales sobre lo que logró el gobierno de Nicolás Maduro y que, pese a los resultados anunciados, el proceso quedó opacado por el descontento popular que hay entre la población venezolana.
El resultado de la participación fue anunciado por el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis Amoroso, con un total de 10.431.907 votos. Aunque los venezolanos cuestionaron la falta de colas en las afueras de, al menos, 28.000 centros habilitados para participar.
El politólogo Radamés Graterol precisó a El Pitazo, durante una entrevista telefónica, que el único ganador fue la opinión pública porque la gente, en este caso, dejó de expresarse porque no se sentía identificada con el proceso.
El referendo consultivo por el Esequibo que se realizó este domingo, 3 de diciembre, avivó el debate en redes sociales sobre lo que logró el gobierno de Nicolás Maduro y que, pese a los resultados anunciados, el proceso quedó opacado por el descontento popular que hay entre la población venezolana.
El resultado de la participación fue anunciado por el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis Amoroso, con un total de 10.431.907 votos. Aunque los venezolanos cuestionaron la falta de colas en las afueras de, al menos, 28.000 centros habilitados para participar.
El politólogo Radamés Graterol precisó a El Pitazo, durante una entrevista telefónica, que el único ganador fue la opinión pública porque la gente, en este caso, dejó de expresarse porque no se sentía identificada con el proceso.
En varios estados del país, electores reportaron amenazas y entrega de combustibles y bolsas de alimentos del Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP) en las afueras del centro de votación, después de que pasaban por mesas que tenían activistas del oficialismo.
Se usaron los recursos del Estado para tratar de seguir captando ciudadanos con algunas dádivas. También Graterol habló sobre la ostentación del fraude, precisamente, lo que busca el gobierno de Maduro después de anunciar los resultados de este referendo.
“Yo creo que la reacción que se busca es desmotivar a la gente a que vote en los próximos procesos electorales, porque lo que se quiere vender es que este es un Gobierno que no puede ser derrotado en ninguna instancia y mucho menos en una de carácter electoral, porque la gente hace la comparación de las calles y dirá: bueno, si no vimos a casi nadie votando, sino que todos fuimos testigos de lo que pasó el 22 de octubre”, finalizó.
¿Cuáles organizaciones respaldaron el referendo?
El Esequibo es un territorio de casi 160.000 kilómetros cuadrados en disputa con Guyana y este fue un acto participativo que se promovió como “patriótico” y lo respaldaron el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), sus aliados del Gran Polo Patriótico, Patria Para Todos, Tupamaro, Movimiento Electoral del Pueblo, Unidad Popular Venezolana y Alianza para el Cambio.
El 8 de noviembre, Amoroso aseguró que 29 organizaciones con fines políticos se sumaron al referendo consultivo, 60 del llamado poder popular, 47 universidades, 15 organizaciones de la sociedad civil, 6 gremios, 7 sindicatos y 3 de grupos indígenas, para un total de 167 adhesiones.
En el proceso del domingo 3 de diciembre, los dirigentes de oposición Manuel Rosales, Henrique Capriles y otros voceros manifestaron su respaldo a este referendo y participaron. Esto fue rechazado por los militantes de sus partidos políticos después de que extendieron la invitación a la defensa del territorio.
