Francisco Palmieri, jefe de misión de Estados Unidos para Venezuela, dice que su gobierno está atento a la masiva participación de los venezolanos en la elección presidencial del 28 de julio, a pesar de los incumplimientos al Acuerdo de Barbados y que no se trata de unos comicios justos. Apunta que la comunidad internacional está atenta para ayudar en un proceso postelectoral, y reitera que Washington sigue buscando la manera de deportar a quienes crucen ilegalmente hacia su territorio
Víctor Amaya / Tal Cual
Para Estados Unidos toda la atención está puesta en que el 28 de julio efectivamente ocurran unas elecciones presidenciales en Venezuela que sean útiles. Así se desprende de las palabras del Jefe de Misión para Venezuela, Francisco Palmieri, entrevistado por TalCual.
El embajador encargado dice que para su país los comicios venezolanos están llenos de problemas y «no es una elección ideal», pero que la oposición está peleando para participar y «están haciendo todo para llevar al pueblo venezolano a las urnas el 28 de julio. Creo que todos deben participar en esa elección porque es la única manera de salir de la crisis económica, humanitaria y política».
Palmieri reitera que para Estados Unidos es preocupante el incumplimiento del Acuerdo de Barbados, que siguen considerando como la hoja de ruta clave para las elecciones presidenciales. Particularmente les ha preocupado «el incumplimiento» a la habilitación de candidatos de la oposición y la decisión de retirar la invitación a una misión de observación electoral de la Unión Europea, establecida en el acuerdo firmado el pasado mes de octubre. Opina, de hecho, que las condiciones actuales impiden considerar que las votaciones serán justas, pero lo más importante es que la gente quiere votar.
-El Centro Carter confirmó que participará con una misión «de alcance limitado» en la observación internacional. La participación de esa organización es garantía suficiente de que este será un proceso respetable?
-Estamos enfocados es en cómo llegar al 28 de julio. Lo más importante es que la elección es algo en lo que la oposición, y Edmundo González (el candidato unitario) particularmente, me ha dicho quieren participar ese día. La observación internacional es un componente muy importante sin duda. Esa elección no será calificada históricamente como justa y creíble por tantas cosas que han pasado. Pero la población, los venezolanos, quieren participar, quieren votar y en ese sentido estamos enfocados en eso.
-Ante el Tribunal Supremo de Justicia cursa una solicitud de amparo para que se suspendan las elecciones hasta tanto Estados Unidos levante todas las sanciones. ¿Qué opinión le merece tal planteamiento?
-Eso no tiene sentido porque según el Acuerdo de Barbados van a tener una elección el 28 de julio, y nada que ver con lo que está vinculado a otros temas está en ese acuerdo.
-¿Es cierto que luego de una elección presidencial con unos resultados respetables y reconocidos las sanciones se eliminarían o se iniciaría un proceso para desactivarlas?
-Cuando Nicolás Maduro y su equipo firmó el Acuerdo de Barbados en octubre del año pasado, al día siguiente Estados Unidos ofreció un incentivo muy importante en el sector de petróleo y gas para hacer avanzar el acuerdo, para ayudar a las diferentes partes del acuerdo a cumplir con los compromisos y la hoja de ruta electoral. Siempre ha estado en las manos de Nicolas Maduro y su equipo conseguir más relajamiento, menos sanciones, si cumplen con todas las partes del Acuerdo de Barbados, pero decidieron no cumplirlo y eso resultó en que suspendimos ese incentivo. Ahora, hablar de qué pasará después de la elección, hay mucho camino desde ahora hasta el 28 de julio. Si quieren dejar esa posibilidad abierta, hay que cumplir (el Acuerdo de Barbados) y tener una elección más competitiva e inclusiva.
-¿Si gana Edmundo González las sanciones se levantarían?
-Lo más importante es ver cómo van las elecciones el 28 de julio. Últimamente mi subsecretario de Estado Adjunto para el Hemisferio (Brian Nichols) comentó que hay que cumplir con las elecciones y veremos cuáles serán los resultados.
El pasado viernes 21 de junio, el subsecretario de Estado de EEUU para el Hemisferio Occidental, Brian Nichols, consideró que aún hay tiempo de que las elecciones presidenciales del 28 de julio sean competitivas y adelantó que Washington está dispuesto a reconocer los resultados, siempre y cuando el proceso cumpla con unos estándares mínimos de legalidad.
Señaló además que hay una inclinación del campo de juego a favor del mandatario Nicolás Maduro pero enfatizó que es importante observar el tamaño de las concentraciones y actos políticos de la oposición, ya que se evidencia «mucho entusiasmo» y hay optimismo. «Observaremos el proceso de cerca y esperamos que la presencia de observadores internacionales ayude a brindar mayores garantías al proceso», aseveró.
El 22 de junio se conoció que el gobierno de Colombia ha propuesto un nuevo borrador para un acuerdo que garantice la integridad de todos los actores que participan en la elección presidencial venezolana luego de realizado el evento, y que supuestamente espera por el visto bueno del gobierno de Nicolás Maduro. El documento es uno de los incentivos con lo que se pretende evitar que se concreten amenazas que impidan la celebración de los comicios el 28 de julio.
Ante ello, el embajador especial para Venezuela, Francisco Palmieri, agrega en conversación con TalCual que «esa iniciativa de Colombia, con el apoyo de Brasil, refleja que la comunidad internacional y los países vecinos de Venezuela quieren llegar al 28 de julio y ver una elección competitiva e inclusiva. En ese sentido, ellos están demostrando que, si llegamos, la comunidad internacional está dispuesta a ayudar en el proceso postelectoral. Pero en ese momento creo que todos estamos llamando al pueblo venezolano a participar en la elección».
-¿En qué estatus está el diálogo o las conversaciones con la administración de Nicolás Maduro para retomar los vuelos de deportación de migrantes venezolanos, que quedaron fríos en febrero pasado?
-Hemos dejado abiertos los canales de comunicación con Nicolás Maduro. Queremos buscar la manera más humanitaria para devolver a venezolanos que han llegado a EEUU de manera no documentada y no siguiendo caminos legales. Pero el presidente Joe Biden y los EEUU han dicho muy claro que los que lleguen a la frontera y traten de entrar de una manera no legal, van a ser repatriados a los países de donde han venido.
-¿Esos canales de comunicación con Maduro, esa puerta abierta, ha sido cruzada, se mantienen conversaciones con la administración de Maduro?
-Hemos hablado de muchos temas, repatriación, elecciones, la detención de presos políticos, pero lo más importante es que queremos ver una elección competitiva a inclusiva.